domingo, 12 de septiembre de 2010

MARÍA, Mujer judía - Graciela Iriondo, 12 de Setiembre, Vicente Lopez

           
              Virgen María y José: Representación de la Natividad en la Iglesia San Gabriel ( Dic.2009)

MARÍA

Mujer judía

8 de septiembre es el día en que nació María, la Madre de Dios. Hija de Ana y Joaquín, abuelos de Jesús.

María cultivó una espiritualidad desde niña. Sus padres la educaron en la Fé. Mujer judía. Familia judía. De ese hogar nació Jesús, con un conocimiento profundo de las Escrituras Sagradas, que antes se leían en rollos, en papiros, ... que muy pocos sabía leer por aquellos tiempos. Y María aprendió las escrituras en su casa, de sus padres, una catequesis familiar.

Luego en el Templo, era Servidora de Dios. En aquel tiempo había una orden, o grupo espiritual, dentro del judaísmo, llamados: Los Servidores de Dios. María creció en ese ámbito. Y desarrolló esa Fé pura y sincera, profunda de corazón.

Su contacto con Dios era íntimo y entrañable. En sus oraciones dialogaba con Dios, hablaba con Él, su Señor. Y a su Voluntad respondía. Sabía oír los pedidos del Señor. Oír con el corazón.

María encarnó y dio a Luz. Un hijo santo para el mundo. El que traía la Luz dentro de su vientre. Amado hijo. Amada madre. En Comunión estaban. Hasta que él tuvo que desprenderse y partir con su misión. Con su tarea. Que duró tres años. Intensos tres años en los que se desarrolló la vida pública de Jesús, que es relatada en los cuatro libros llamados Evangelios. El libro de Lucas, el libro de Juan, el libro de Marcos, y el libro de Mateo. Estos cuatro libros forman lo que se conoce como Evangelios de Nuestro Señor.

Envangelio significa: Buena Noticia. Fueron escritos hace 2000 años, y aún siguen editándose. Siguen vigentes. Cuentan la historia de Jesús. Su Palabra. Sus enseñanzas. Su vida. Cada uno de los cuatro escritores (Marcos, Lucas, Mateo y Juan) lo cuenta en su propio estilo. Y los cuatro forman una Unidad.


Graciela iriondo
desde Vicente López, 12 de septiembre 2010.

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jueves, 2 de septiembre de 2010

CONCIENCIA DESPIERTA, UN MENSAJE DE GRACIELA IRIONDO

CONCIENCIA DESPIERTA

Actuar a conciencia.
Ser vigilante de uno mismo.
Respetuoso de la propia conducta.

Dios te ha confiado algo.

Te ha dado la Libertad plena de los Hijos de Dios.
Para que puedas discernir y actuar según tu conciencia te lo indique.
Para ello es necesario desarrollar la capacidad de discernimiento.
Obrar bien. Aunque no seas visto por nadie.
Obrar rectamente. Elegir el bien.
Si te encomiendan una tarea, ser buen administrador. No quedarte con los que es de otro.
Recibe lo que es tuyo. Y entrega lo que es de otro.

Un buen administrador es confiable a los ojos de Dios.

Dios ve siempre sus actos.
Dios ve el movimiento de su corazón.

Dios ve en el Alma de las personas.
Y sabe cuándo actúan rectamente.
La conciencia despierta es un alma que agrada a Dios.
Graciela Iriondo

Desde Vicente López, Buenos Aires, Argentina, 26 de agosto de 2010.
Inspirado en el Evangelio de San Mateo, capítulo 24, 42-51.

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